Biografía de Eduardo Wilde





    Eduard Wilde nacido el 15 de junio de 1844, Tupiza, Bolivia. Fue un médico, político, diplomático y escritor argentino.
    El abuelo, Santiago Wilde, llegó de Inglaterra para radicarse en Buenos Aires señalándose como periodista y funcionario; el padre, Coronel Diego Wellesley Wilde, contrario a Rosas, luchó en la Batalla de la Ciudadela, exiliándose luego con su familia en Bolivia, luchó contra los caudillos y en la guerra del Paraguay; la madre, doña Visitación García fue una distinguida dama tucumana de filiación unitaria.
    Su infancia transcurrió en Bolivia experiencia reflejada en el libro Aguas abajo.

    Entra en la política, afiliándose al Partido Autonomista. Es electo diputado a la legislatura provincial y luego, por dos veces consecutivas, al Congreso nacional. El 11 de febrero de 1882 Julio Argentino Roca lo nombra ministro de justicia, culto e instrucción. Habiendo continuado en el ministerio del interior durante el gobierno de Juárez Celman corrió la suerte de éste hasta 1889.

    Dotado de un fino humorismo y de un sentido literario innato, Eduardo Wilde cultivó la narración por expansión espiritual, con los naturales descuidos en el estilo; su realismo, intensamente dramático, contiene ya una serie de matizaciones que anuncian el modernismo. Quizá sin pretenderlo, es una de las figuras literarias argentinas más vigorosas de su época.

    El más importante de sus trabajos es autobiográfico y se titula Aguas abajo. El resto de su obra, producido sin plan preconcebido y disperso en diversas publicaciones, se agrupa principalmente en los volúmenes titulados Prometeo y Cía. y Tiempo perdido, y en los libros de viajes Por mares y por tierras y Viajes y observaciones. En Prometeo y Cía. está incluido el más conocido de sus cuentos, Tini.

    Destacado miembro, junto con Lucio Vicente López, Miguel Cané y Lucio V. Mansilla, de la cosmopolita generación del 80, su sentido del humor recuerda a Charles Dickens, y su pesimismo trascendente a Mariano José de Larra. Pero el humorista con sangre anglosajona en sus venas resultaba extravagante para sus compatriotas; y aunque sabía jugarse la vida en la lucha contra la fiebre amarilla, su heroísmo se ocultaba en una elegante impavidez que no permitía estimarlo de pronto en lo que significaba.

    Falleció en septiembre de 1913, Región de Bruselas-Capital, Bélgica.


Comentarios

Entradas populares